Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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Los avances más importantes que ha experimentado la pediatría

La tecnología y la ciencia contribuyen, de manera permanente, para que los niños sean más sanos y gocen de más seguridad, creciendo como adultos saludables.
Los avances más importantes que ha experimentado la pediatría. Salud. La Nueva. Bahía Blanca

David Roldán

droldan@lanueva.com

No existe ninguna duda sobre los significativos avances que ha experimentado en los últimos tiempos la medicina que hace foco en la infancia.

Pues ha aportado herramientas para la prevención y el tratamiento de enfermedades que décadas o años atrás representaban una condena para quienes las padecían.

Y, sin embargo, a la hora de determinar cuáles han sido los que más impacto han tenido en promover la salud de niños y adolescentes, no es tan fácil distinguirlos de aquellos otros que quizás han tenido más difusión pero menos efectividad.

Es por ello que en el ámbito de las Sociedades Académicas de Pediatría de los Estados Unidos se ha dedicado un segmento especial para debatir en torno de los siete avances que más impacto han tenido en los últimos 40 años a nivel global.

“En la actualidad tomamos como naturales estos avances obtenidos gracias a la investigación”, comentó la doctora Tina Cheng, directora del Comité de Investigación Pediátrica de la Academia Americana de Pediatría, de los Estados Unidos.

Se refería a los avances que permitieron salvar la vida de millones de chicos en todo el mundo, reduciendo, incluso, la carga de discapacidad y mejorando la calidad de vida de la infancia.

Sin embargo, es gracias a la investigación a la ciencia que se consigue que hoy los niños sean más sanos y gocen de mayor seguridad y que puedan crecer como adultos más saludables.

A continuación, los siete avances más importantes en pediatría:

1-- Prevención de enfermedades como el rotavirus o infección por Haemophilus influenzae type b (Hib) a través de vacunas.

Esto es incuestionable y basta citar algunas estadísticas que confirman que de todas las inversiones que se realizan en salud, la vacunación es la más costo-efectiva.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que cada año las vacunas evitan la muerte de entre 2 y 3 millones de personas en todo el mundo y un gran porcentaje de estas son niños.

Enfermedades que causan muerte y discapacidad, como la poliomielitis, el sarampión, la rubéola y el tétanos neonatal han sido declaradas eliminadas de América Latina, gracias a las vacunas.

2-- Salvar a los niños prematuros al ayudarlos a respirar.

Hace poco más de 20 años, sólo sobrevivía entre el 15 y el 20 por ciento de los bebés con un peso inferior a un kilo.

Hoy, en algunas maternidades la tasa de sobrevida de un bebé que nace con un peso de entre 750 y 1.000 gramos es del 80 por ciento, mientras que la de los que pesan entre 1.000 y 1.500 gramos es de casi el 100 por ciento.

Buena parte de ese avance se explica por la implementación de las distintas estrategias médicas que permiten hacer frente al síndrome de dificultad respiratoria, la enfermedad más grave en el prematuro.

3-- Reducción de la incidencia del Síndrome de Muerte Súbita del Lactante.

Esto se logró gracias a las campañas que han difundido la importancia de que los bebés duerman boca arriba.

En los países industrializados, el síndrome de muerte súbita del lactante constituye la primera causa de muerte antes del año de vida.

Por eso, se recomienda acostar al bebé boca arriba o de costado, que sus brazos queden destapados y sus pies no muy lejos del extremo de la cuna.

También, que sus brazos queden destapados y sus pies no muy lejos del extremo de la cuna; que el colchón no sea muy blando; que la habitación no sea muy calurosa y, por sobre todo, que no se fume donde duerme el bebé.

4-- La cura de la leucemia linfocítica aguda en los niños.

Esta forma de cáncer es una de las más frecuentes en la infancia.

Suele diagnosticarse entre los 3 y los 7 años de edad.

El tratamiento mediante quimioterapia, radioterapia o, incluso, el trasplante de médula, ha permitido que la tasa de supervivencia general a 5 años haya aumentado a cerca del 90 por ciento en los niños menores de 15 años.

5-- Prevención de la transmisión madre-hijo del VIH.

Medidas como el tratamiento de la embarazada con VIH, el parto por cesárea, el no amamantamiento y el tratamiento precoz de los recién nacidos ha permitido reducir drásticamente el nacimiento de chicos con VIH.

6-- Incrementar la expectativa de vida de niños con enfermedades crónicas como la fibrosis quística.

Años atrás, la sobrevida de esta enfermedad era de un año a partir del diagnóstico, mientras que hoy el 40 por ciento supera esa marca,.

Incluso, el promedio de vida, que antaño rondaba los 25 años, hoy ha sido largamente superado, con una gran proporción de pacientes que alcanza la edad adulta.

7-- Salvar vidas gracias a los asientos para auto para chicos y los cinturones de seguridad.

El uso extendido de estas medidas de protección para los bebés y chicos redujo significativamente el número de menores que son víctimas o resultan con graves lesiones tras un accidente automovilístico.

Los especialistas consideran que se ha recorrido un largo camino.

De todas maneras, admiten que se tiene que ir aún más allá para comprender cómo prevenir y curar enfermedades.

Hay una necesidad de nuevo conocimiento, nuevas vacunas y nuevos tratamientos para mantener la salud y curar enfermedades.

Y esto, obviamente, requiere de una continua investigación.