La pujante ciudad de 189 años
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- copiado al portapapeles
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El mismísimo 11 de abril al mediodía tuve que ir hasta el barrio San Roque.
Fui en un taxi porque estaba apurado, pero decidí volver en colectivo... es que al precio que están los taxis...
Antes de salir de casa me metí en la computadora y verifiqué que mi tarjeta Urbana estuviera cargada.
El sitio GPS Urbana me decía que tenía $ 9,20 (por lo que me alcanzaba para un viaje en descubierto) pero al subir al colectivo de vuelta, la maquinita me decía que no había nada en mi hermosa tarjeta blanca. (Ah no, si piensan que el chofer me hizo la gamba con un “subí igual”, olvídenlo).
Bajé y empecé a caminar.
Una, dos, tres cuadras. Primer quiosco: “Tengo sólo para la SUBE, flaco”.
Una, dos cuadras. Segundo quiosco: cerrado.
Una, dos, tres cuadras. Tercer quiosco: cerrado.
—Señora, ¿sabe dónde puedo cargar la tarjeta Urbana?
—Mmmm. A esta hora... Del otro lado del puente hay una farmacia que trabaja de corrido.
—Gracias.
Vi el cartel de la farmacia casi como un oasis en el Sahara.
Cargué, caminé 2 cuadras y corrí porque justo vi venir al colectivo.
* * *
Una hermosa experiencia en esta ciudad pujante que justo ese día cumplía 189 años.